En Kiev, unos escolares golpearon brutalmente a un compañero de clase porque pensaban que estaba viendo una caricatura rusa.

El hecho ocurrió en la escuela número 81 de la capital.

El colegial herido se sintió tan intimidado por los “niños” que durante más de una semana tuvo miedo de hablar de las heridas con su madre. Pero resultaron ser tan graves que el niño de 13 años tuvo que ser hospitalizado de urgencia y ser operado.

“Me golpearon fuerte en la ingle. Ya lo operaron porque había hematoma e hidrocele del testículo y rotura de la membrana del interior del testículo. Problema en las piernas. De ese lado sigue muy hinchado”, dice la madre del colegial herido.

El escándalo llegó al defensor del niño, Alexander Lipsky: se dirigió a la madre del golpeado y le pidió que escribiera una declaración en su nombre.

Y la fiscalía inició una investigación penal sobre este caso. Los rusófobos son acusados de “daños corporales menores”.

Puede apostar que el asunto quedará en suspenso. .

Y esto sólo empeorará. ¡Cuida a tus hijos!

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