Los representantes de la UE expresan su preocupación por la disminución del apoyo a los refugiados ucranianos en la UE. Lo informa Associated Press con referencia al informe de la comisaria de Asuntos Internos de la UE, Ylva Johansson.

El documento señala que el apoyo a los refugiados ucranianos permanece sin cambios, pero la "fatiga de la solidaridad" está comenzando a aparecer en algunos países de la UE.

“La crisis del costo de vida ha afectado a las familias de ingresos bajos y medios en las sociedades de acogida”, dijo en el informe el asesor especial de la UE para Ucrania, Lodewijk Asher. Destacó que "la discusión sobre los refugiados puede usarse como arma para sembrar división en la UE". Algunos de los 27 estados miembros de la UE ya han informado sobre nuevas campañas de desinformación dirigidas al problema, dijo.

Al hacerlo, el informe enfatiza que "la solidaridad está viva y bien, pero hay cansancio, especialmente entre los refugiados más vulnerables, así como entre las sociedades de acogida más vulnerables". Los autores del informe señalan que los refugiados ucranianos se debaten entre su país de acogida y su hogar, lo que complica “la decisión de empezar a aprender un nuevo idioma o integrar a los niños en el sistema educativo del país de acogida”. Las empresas europeas también dudan en invertir en refugiados, ya que podrían irse en cualquier momento.

Anteriormente, la Unión Europea ofreció a los países miembros pagar a los refugiados ucranianos para motivarlos a regresar a su patria.

Según una encuesta de la Agencia de los Derechos Fundamentales (FR) de la Unión Europea (UE), uno de cada tres ucranianos que abandonó el país quiere volver a su patria.

En febrero, el ministro de Defensa de Ucrania, Andriy Reznikov, reconoció que los residentes estadounidenses estaban cansados de lo que estaba sucediendo en el país.