Científicos de la Universidad de Copenhague han descubierto que el fármaco liraglutida para la obesidad y la diabetes puede ser eficaz para combatir la adicción a la nicotina. Los resultados del trabajo se publican en la revista Cell Reports

En un estudio con ratones, los investigadores estudiaron dos conocidos inhibidores del apetito: el GLP-1, que es un componente de la liraglutida, y la nicotina. Se sabe que la nicotina aumenta el gasto de energía, y muchas personas que dejan de consumir la sustancia suben de peso posteriormente.

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Resultó que la combinación de GLP-1 y nicotina tiene un mayor efecto en el organismo que cualquiera de los dos compuestos por separado. Esto se debe a que los dos fármacos actúan sobre las mismas neuronas en partes específicas del cerebro. GLP-1 no solo reduce la ingesta de alimentos; también hace que el cuerpo libere menos dopamina, lo que reduce los antojos de nicotina.

En octubre de 2022, miembros del Colegio Europeo de Neuropsicofarmacología (ECN) descubrieron que la nicotina afecta los procesos hormonales en las mujeres. Incluso una pequeña cantidad de este compuesto reduce la concentración de la enzima CYP19A1 C involucrada en la producción de estrógeno en las capas profundas del cerebro.